Hechos de interés en torno a la barrera radiante

La barrera radiante, como ya se sabe, se utiliza para reducir el aumento del calor durante el verano en los áticos o en áreas debajo de los techos. Dichos espacios se calientan cuando la energía del sol calienta las cubiertas o techos, con lo que el calor se transfiere al interior a través de los materiales de techado por el fenómeno de la conducción. La temperatura de tales áreas aumenta haciendo que ese calor se transfiera a las partes más bajas del edificio, aumentando así el consumo de energía de acondicionamiento durante el verano y por ende los costos de enfriamiento.

Por fortuna, las barreras radiantes pueden reducir la transferencia de calor, mantener el espacio del ático más fresco y reducir los gastos hasta en un 20% en climas más cálidos. En esta ocasión, para mayor detalle, explicaremos algunos hechos de interés en torno a las barreras radiantes. No olviden contactar a nuestra firma Termofoil si están interesados esta tecnología de recubrimiento. Sin más que añadir, ¡Comencemos!

Las barreras radiantes se han visto envueltas como muchas otras cosas en mitos urbanos. Por ejemplo, estas no fueron inventadas por la NASA como algunos afirman, sino por los empresarios alemanes Schmidt y Dykerhoff, en 1925. En realidad, la NASA ha empleado barreras radiantes desde el programa Apolo para su uso en equipos, trajes de astronautas y naves espaciales con el fin de brindar protección contra la radiación térmica y aislar las temperaturas fluctuantes del espacio; también es un hecho que el color y la reflectividad de una sustancia no aumentan su eficacia como barrera ante radiación. Si bien las barreras radiantes contribuyen significativamente a la reducción de los costos de enfriamiento, no son la panacea para la eficiencia energética que algunos creen que son; en realidad necesitan ser utilizados como parte de un sistema de edificio cohesivo.

La radiación del sol es la principal fuente de calor que afecta la temperatura de los techos; la radiación infrarroja se ve aumentada por la convección y la conducción. La convección se da cuando el calor se transfiere a través del aire dentro del techo  y la conducción ocurre cuando el calor se mueve a través del aislamiento hacia la parte baja del edificio. Mientras que el calor se irradia y se conduce en todas las direcciones, siempre se mueve desde áreas calientes a áreas frías. Por ello, cuanto más caliente está el techo, más se mueve el calor hacia la parte más fría y baja del inmueble.

El revestimiento de barrera radiante más efectivo consiste en un panel estructural del techo, o mejor dicho, en un panel OSB con lámina reflectante de calor laminada a un lado. Otros tipos de barreras radiantes combinan materiales reflectantes (generalmente papel de aluminio) con materiales como películas de plástico, cartón y papel kraft. Cabe agregar que una barrera radiante debe tener una emisividad de 0.1 o menos para ser efectiva.

Al utilizar un revestimiento de barrera radiante OSB, se puede reflejar hasta el 97% de la radiación solar, lo que se traduce en una reducción de calor en el techo de hasta 30 ° F. Una cubierta más fría significa menos calor moviéndose a los espacios más fríos bajo esta. Asimismo, cuanto más caliente se pone, mejores son las barreras radiantes. La temperatura reducida de las áreas bajas aumenta la eficiencia de los conductos del techo, lo que prolonga la vida útil de los sistemas de calefacción y refrigeración debido a que hay menos tiempos de acondicionamiento. El revestimiento del techo con barrera radiante ayuda a mejorar el confort en el interior del edificio durante los cálidos meses de verano y reduce los costos de energía. Debido a que el calor siempre se mueve de áreas calientes a áreas frías, el revestimiento radiante de la barrera también evita la transferencia de calor desde el interior cálido durante los meses que son más fríos.

Con respecto a la instalación, las barreras radiantes requieren manos expertas para funcionar de manera efectiva; deben colocarse con el lado de la lámina hacia el techo, junto a un espacio al aire libre, asimismo se debe asegurar que la ventilación de la parte baja del techo no esté bloqueada. Cabe agregar que si se acumula polvo en la superficie de la lámina, la barrera será menos eficiente.

Al instalarse el revestimiento del techo con barrera radiante, es importante que se sigan las instrucciones del fabricante cuidadosamente. Asimismo, al colocar cualquier cubierta de techo estructural, debe asegurarse que el revestimiento esté espaciado a pocos milímetros en todas las juntas, para permitir la expansión y contracción debido a cambios en las condiciones de humedad. Tienen que consultarse también los códigos de construcción locales, y las especificaciones de los profesionales de diseño.

Los techos deben estar adecuadamente ventilados para cumplir con el código y para garantizar que el aire caliente pueda escapar de este y con ello eliminar la humedad que se llegue a acumular. Una vez instalada la barrera, es importante no permitir que otros materiales, entren en contacto con la lámina. Igualmente, se tiene que dejar al menos un espacio de cinco centímetros y usar deflectores para crear un suficiente espacio de aire.

Algo que no está de más mencionar, es que al construir o adaptar el techo con una barrera radiante, se mejorará el valor y la capacidad de venta de las viviendas. Los ahorros en el uso de energía, el tamaño y la duración de los sistemas HVAC pueden traducirse en ahorros para el propietario de la casa y por ende son capaces de proporcionar un excelente retorno de la inversión inicial. Se trata sin duda de un excelente invierno para aquellos que viven en áreas donde el calor suele ser abundante, como en el sur y el centro de Latinoamérica.

Esperamos que esta publicación haya sido amena así como útil para ustedes, no olviden ponerse al contacto con nuestra firma si están interesados en adquirir e instalar una barrera radiante para los techos y cubiertas de su propiedad. Años de experiencia en el mercado colombiano nos respaldan.

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