La forma más común del cielo raso en una construcción es en forma de las placas de yeso que se colocan debajo de los techos para crear un falso techo, que puede servir como un sistema de aislamiento técnico avanzado para las construcciones. Por lo regular se suelen utilizar para tapar instalaciones de luz, aire acondicionado, sistemas antiincendios, entre otros, para que no queden expuestas, pero también tienen otros usos, como el de bajar los techos demasiados altos, hasta el jugar con las diferentes alturas para aprovechar la luz y lograr ambientes más cálidos.
Una de las mejores opciones que se utilizan para este tipo de instalaciones son las tablillas de PVC, cuyas ventajas son muchas en la construcción, puesto que son un producto muy resistente, impermeable y es difícil de mancharse; además son muy fáciles de instalar y desinstalar, así como certifican una larga duración con un mínimo de mantenimiento.
Una de las grandes ventajas de este tipo de instalaciones es que no requieren de mantenimiento constante, aunque en caso de cubrirse de polvo lo más recomendable es pasarle únicamente con un trapo para remover cualquier tipo de suciedad, que puede reducir la efectividad de sus aplicaciones, como el aislamiento térmico.
¿Para qué sirven los cielos rasos en las construcciones?
Esos sistemas tienen muchas aplicaciones, ventajas y beneficios para la construcción. El primero que se puede destacar es que es un producto con una alta resistencia a los impactos, por lo que no requieren ser sustituidos con frecuencia; de acuerdo con el material del que esté hecho, su resistencia puede ser mayor o menor. De igual manera son impermeables, por lo que no permiten que entre la humedad del ambiente en los espacios que cubren; además son difícil de mancharse y no requieren de una gran limpieza.
Otra de sus características es que son fáciles de instalar y desinstalar, ya que se montan sobre una estructura de gran resistencia y no necesitan de un sistema de fijación. Asimismo, no requieren de mantenimiento constante, en caso de mancharse lo más recomendable es limpiarlos con un trapo seco, para que pueda retirar la suciedad, la cual puede reducir su eficiencia como aislamiento térmico.
Una de sus principales aplicaciones es bajar el nivel del techo de las habitaciones, esto permite que sean mucho más fáciles de acondicionar, ya sea aumentar o disminuir la temperatura. Esto representa un ahorro significativo en el consumo de energía requerida para los sistemas de climatización.
Otra de las aplicaciones que tienen es que permiten jugar con la iluminación, tanto la natural como la artificial, por lo que pueden lograr efectos increíbles en cuanto a iluminación, así como aprovechar la luz natural que entra por las ventanas, por lo que pueden reducir los costos de energía para iluminación.
Una última aplicación que se le puede dar al cielo raso es que actúa como un aislante de ruidos, sobre todo en los pisos inferiores, donde pueden entrar ruidos de lluvia, el sonido ambiental o incluso de las actividades que suceden en pisos superiores, por lo que estos sistemas permiten reducir los niveles de sonido de manera significativa.
Materiales necesarios para su instalación
La instalación de los cielos rasos es muy sencilla, además, los materiales que son utilizados son económicos y muy resistentes. No siempre suelen ser los mismos, varían de acuerdo con el diseño que tendrá este techo adicionar que estará en el interior de las construcciones. Los elementos básicos más comunes son:
- Son los elementos que sostienen las láminas del material que son utilizados, pueden ser de aluminio o acero, son ligeros y de alta resistencia, además soportan la corrosión.
- Parales verticales. Son necesarios para poder obtener la altura que tendrá el techo con relación con el que ya existe.
- Láminas de yeso o de PVC. El yeso y el PVC son los materiales más comunes para la instalación de cielos rasos, y de acuerdo con el tipo de lámina y tipos de rieles requieren de clavos, tornillos, alambre, pegamento, entre otros.
Dentro de los principales aspectos que tienen que tomar en cuenta al momento de instalar los cielos rasos es la decoración, por ello es importante elegir de manera adecuada los tipos de materiales, diseños y colores en los que están disponibles, así como todas sus características, puesto que en ocasiones suele haber láminas que son muy atractivas estéticamente, pero no cumplen con las mejores características.
Por otra parte, la humedad es un factor importante que tienen que tomar en cuenta, ya que el techo debe estar impermeabilizado de la manera adecuada, ya que si existe algún tipo de filtración en la zona donde será instalada, se pueden provocar daños irreparables y será necesario hacer un cambio de todo el techo.
En cuanto su mantenimiento, que es una de las variables que menos se analizan antes de la instalación y que es uno de los más importantes, ya que puede hacer la diferencia para evitar las inversiones adicionales; siempre deben tener en cuenta que el tipo de mantenimiento varía de acuerdo con el material de las láminas. Por lo regular, como hemos mencionado, no se mancha, pero sí suelen acumular polvo y suciedad, que deben retirar con un trapo húmedo o uno seco. Los de PVC pueden ser limpiados con ciertos productos no corrosivos, pero los de yeso requieren de un mínimo contacto con el agua, ya que pueden ser dañados o afectados por esta.
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